«Nuestro negocio ha crecido considerablemente, también en línea, y estamos seriamente pensando en desarrollar una aplicación para algunos servicios que gustan a nuestros clientes o para adquirir nuevos. Es un pensamiento que no es fácil de convertir en realidad, especialmente porque la mayoría de nosotros no tiene habilidades informáticas para pensar en crear una aplicación desde cero.
Hay dos puntos clave: saber a quién nos dirigimos y para qué. No son preguntas simples. La aplicación no puede considerarse simplemente como una ventana para llegar al sitio web, no en 2022. Y tampoco podemos complicarnos la vida incurriendo en gastos para desarrollar una aplicación si no tenemos claro qué podemos y no podemos hacer. Por eso, con este artículo trataremos de aclarar cuánto cuesta desarrollar una aplicación en 2022.»
¿Qué pedirle a un desarrollador de aplicaciones?
Si partimos de la pregunta clásica: «Quiero crear una aplicación para mi negocio, ¿cuánto cuesta?», debemos tener en cuenta que nunca tendremos una respuesta a esta pregunta. Imagina entrar en una tienda de muebles y preguntar: «¿Cuánto cuesta amueblar mi casa?» o en un concesionario de automóviles y preguntar por el costo de un automóvil que necesito. En los tres casos, es decir, aplicaciones, muebles y automóviles, la respuesta es siempre la misma. Un Lamborghini de 500.000 euros se puede usar para ir de compras exactamente igual que un Panda de 9.000 euros. Puedes llevar a tus hijos a la playa con un SUV de 60.000 euros, pero también con un utilitario de 10.000. En resumen, todo depende de lo que queramos, de lo que queramos que la aplicación haga, a qué público nos dirijamos, etc.
Pero la cosa que debemos saber es que no basta con unos pocos cientos de euros. Si acudimos a un experto del sector y necesitamos ofrecer 2-3 servicios a los clientes (por ejemplo, reservar o comprar productos), debemos presupuestar al menos 3 o 4 mil euros. Para aclarar un poco las ideas, sin embargo, podemos dividir las aplicaciones en dos grandes categorías: aplicaciones multiplataforma y aplicaciones nativas.
Tipos de aplicaciones según el lenguaje de los dispositivos
Empecemos por las aplicaciones multiplataforma. Estas se crean con un único proceso de desarrollo y con un lenguaje de programación universal, con el objetivo de hacerlas funcionar tanto en dispositivos Android como en iOS. Pequeña premisa: los grandes sistemas para teléfonos inteligentes y tabletas se dividen en sistemas Android (todos los dispositivos excepto iPhone y iPad) y sistemas iOS (precisamente iPhone y iPad). Hay aplicaciones que se distribuyen en ambas plataformas de venta, es decir, Google Play (Android) y Apple Store (iOS), pero son las mismas. A menudo, no tienen acceso a las funciones del teléfono inteligente y a menudo están sujetas a errores.
Las aplicaciones nativas, por otro lado, son aplicaciones escritas específicamente con el lenguaje Java para aplicaciones Android y con el lenguaje Swift para las presentes en iOS de Apple. En resumen, se trata de desarrollar dos aplicaciones aunque se trate del mismo producto. Sin embargo, son aplicaciones mucho más confiables y potentes, que tienen acceso a múltiples funciones del teléfono inteligente, como contactos, cámara, álbumes de fotos, lo que permite tener la mejor experiencia de usuario. Dependiendo de las funcionalidades, además, podemos dividir las aplicaciones en cuatro categorías: simples, de bases de datos, personalizadas/negocios, y juegos.
Tipos de aplicaciones según sus funciones
Las aplicaciones simples tienen un par de pantallas y funciones básicas, como la linterna, la calculadora y el reloj en su teléfono inteligente. Las aplicaciones de base de datos, por otro lado, son más complejas porque deben almacenar información ingresada por el usuario. Por lo tanto, la aplicación debe presentar formularios de registro y solicitudes de datos, y ser capaz de sincronizar archivos interactuando probablemente con varios dispositivos: un ejemplo clásico es la libreta de direcciones.
Las aplicaciones personalizadas o empresariales son algunas de las más complejas porque el usuario puede hacer muchas cosas, conectarse con otros usuarios o con un centro de comunicaciones: pensemos en las aplicaciones de redes sociales o en las de domótica para el hogar o incluso en aquellas que nos permiten hacer compras. Si tiene en mente crear una aplicación de juego para atraer a posibles clientes, entonces estamos frente a una aplicación aún más compleja, en la que una historia cautivadora, gráficos atractivos y facilidad de uso, así como la interacción con otros usuarios, son elementos imprescindibles.
Para estas aplicaciones más complejas, el presupuesto también aumenta, incluso bastante: se puede llegar a contar en cientos de miles de euros.
Otros elementos necesarios para la aplicación
Para darse cuenta de la complejidad de una aplicación, comencemos por los modos de acceso: ¿es una aplicación que necesita una dirección de correo electrónico como credencial de acceso? Por lo tanto, es necesario gestionar el registro del usuario, el correo de confirmación, etc. Es necesario que la aplicación también tenga un área de usuario en la que nuestro cliente pueda revisar los detalles de su inscripción.
Muchas aplicaciones permiten cierto grado de interacción con las redes sociales, por ejemplo, utilizando la inscripción en la red social para la inscripción en la aplicación o permitiendo la publicación de contenido de la aplicación en el propio perfil social. Muy útil cuando se quiere que su mensaje circule en las redes sociales.
Sistema de calificación: muchas aplicaciones permiten al usuario expresar una opinión, que se publicará en la tienda. Luego está la parte de compras, es decir, la posibilidad de comprar productos y servicios a través de la aplicación, que requiere, por ejemplo, tener una aplicación con comercio electrónico y capacidad para manejar transacciones comerciales en línea interactuando con los sistemas de pago de los usuarios. Además, otro elemento muy importante es la geolocalización, es decir, permitir entender dónde se encuentra físicamente el teléfono móvil del usuario, lo que podría ser útil para una serie de servicios.
Cómo crear aplicaciones móviles
Hoy en día, se pueden crear aplicaciones móviles acudiendo a profesionales para obtener los mejores resultados, o si se quiere comenzar con algo simple, se puede probar con portales de arrastrar y soltar, sin esperar grandes resultados: por ejemplo, aplicaciones simples que conectan con su sitio web y permiten una interacción mínima. Los precios varían mucho, desde alrededor de 700 euros para aplicaciones móviles muy simples de bricolaje hasta cientos de miles de euros para soluciones más complejas pero impactantes.
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